toda la carne muy mal abotonada
Manuel Vázquez Montalbán
No me aprieten los lazos
no me deshagan los nudos.
Déjenme caminar
enlazada a su pecho
ceñida hasta el éxtasis
No me abrochen la camisa
ni me calcen zapatos nuevos
Quiero vivir
desaliñada, desnuda
deliciosamente perdida
Como vagabunda
sin piso ni techo
como camino
sin principio
ni fin
Y así, descalza
sentir el polvo del camino
o los cristales
que un día
me brindó el destino
No me obliguen
a lucir medias
con ligas de seda
No me regalen pamelas
ni cintas de colores
Déjenme estar despeinada
Me sobran bolsillos
donde libres moran mis manos
No quiero abrigos de lana
quiero tener tibia mi piel
Déjenme que me estremezca
Que de frío tiemble
que sangre por cada herida
que sin vanidad
permanezca vestida
Con esta piel
vestida de mi
vestida de él
Desnuda de tinta
vestida de piel
MaRía ©
Fotografías: Qeta Gvinepadze