En el más profundo invierno aprendí que había,
dentro de mí un invisible verano
Albert Camus
Le miro, sonríe
Su boca se abre golosa
Me mira, sonrío
Mis ganas desata
Perversa tentación
Qué mí néctar prueba
Qué piden a gritos
Nuestras miradas
Aperitivo exquisito
Qué el fruto promete
Y en ese instante
El se traga la vida
Qué de mi boca nace
Al compás de mi sonrisa
Descubre un poco del todo
Qué en mi labio lame
Y en un suspiro
Decimos te amoS
MaRía©
20/09/2018