Las uñas crecen confiadamente,
aún
saben qué tocarán.
Suaves
son los sueños y la ternura
como niebla
suspendida sobre nosotros,
igual que la campana de Sigismundo
antes que el frío la abrazase.
Oda a la suavidad
Adam Zagajewski
acuchillandome constantemente
débiles y frágiles jaulas
de carcomidas paredes
en ruinas.
Desparramados retazos
de esta, mi insana mente
cuyas heridas
cada vez mayores
son pasajes secretos
de bizarras demencias
que vienen a fustigar
la sensatez de mi vida.
Pasadizos clandestinos
escondidos en bolsillos
de aquel desconocido
que poco a poco
me ocupó el cuerpo
y me encadenó para siempre
en las mazmorras del olvido
despojándome de todo cuanto
era mío, de todo aquello
que era yo.
De aquella que fui
nada queda
borrada de la memoria
solo el hueco de la razón
perdura
Mi mente exige
silencio
porque aquí
habita una loca
una respetable loca
borrada de su propia
memoria
Sigo pensando que la locura es un buen refugio para quien lo dieron todo por amor, allí y en compañía del silencio se curan los corazones.
ResponderEliminarSiempre tus letras tocan de cerca.
Feliz tarde.
Lograrás atravesar esos parajes fríos y angostos y serás tú, completa e indivisible, la que vuelva a dibujar tu memoria. El silencio es un buen compañero.
ResponderEliminarMi abrazo, y mil besos, María.
Híjoles MaRía, tocas el alma con este poema tan desgarrador.
ResponderEliminarUn besote
Nadie debería encadenar a nadie,ni arrebatarle nada.
ResponderEliminarEstremece tu texto.
Besos de lluvia.
(No estoy en casa,no puedo escuchar ahora la canción)
Las imágenes son muy inquietantes,a juego con el contenido...
ResponderEliminar...
Un beso y un fuerte y cálido abrazo!
Me has emocionado, amiga mía, me han llegado hondo tus letras y me han dejado un poso amargo.
ResponderEliminarQuizás la locura sea el mejor medio de defensa para evadirnos de tanto dolor.
Estoy convencida de que la mente es muy sabia.
Te dejo un fuerte abrazo con mis cariños.
Kasioles
Mi querida María, me pego a tus palabras y a esa locura ocasionada, por qué será que el fragmento fustiga y lacera provocando este sentir?? Sólo el corazón junto con la mísera razón... Descifra.
ResponderEliminarUn lujo de entrada, corazón.
Mil besitos, preciosa.
La mente nos arroja a abismos insospechados, querida, más, dentro de esa locura sumergida, es, dónde la lucha entre la razón y el corazón creas éstos desgarros tan sentidos.
ResponderEliminarUna maravilla tus versos, preciosa.
Un besito, María.
Cuando vengo me interno en vos
ResponderEliminarun abrazo
Defenderse usando la locura como arma es que el ataque es muy fuerte, el enemigo no merece tregua. Entre las imágenes y los versos queda un escalofrío que recorre la columna. Abrazos
ResponderEliminarNo somos la misma persona que ayer, hay instantes que arañan muestran piel...
ResponderEliminarY nos volvemos esencia en el colmillo que creíamos parte
Un abrazo en la noche ... De luz
Impresionante este poema.
ResponderEliminarUn beso grande.
María,me ha impactado tu entrada.
ResponderEliminarY sabes?la locura es a veces la forma de estar más cuerda en este mundo.
Los pensamientos negativos que devoran la mente ,por muchas causas ,surgen y sé de ellos,tal vez no por las mismas,pero son fantasmas que paralizan,te hacen trocitos y predisponen a la huida de nostros mismos.SIn embargo ,hay que escapar de ellos.No sé cómo ,pero escapemos, porque una vida hermosa está por continuar,para construir nuestra obra,dejar nuestras huellas y poder RESPIRAR.
Besucos de aliento y aire
Gó
Ya ves que todos estamos un poco locos. Bendita locura, que nos hace únicos. Besotes!!
ResponderEliminarBuenas tardes, MaRía:
ResponderEliminarTu poema –en su evocación delirante de lo que ya no volverá, pues no te lo puedes permitir– le ha hablado a mi recuerdo, pero su conversación ahora no importa, lo que importa es mi presente tras leerte.
Prefiero tener evocaciones de actos dementes por pasión, que cuerdos por aburrimiento. Tardé mucho en saber en mi propia piel lo que es sufrir un desequilibrio emocional, en mi caso no quise borrar mis deliranzas de mi memoria, decidí abrir un blog para recordarme que yo, que siempre había salido cuerdo del deseo caduco, me había trastornado hasta desear ser otro.
Ahora, 27 de noviembre de 2016, solo enloquezco frente a la Realidad, no ante el deseo.
Un abrazo, María,
Hay algo perverso en el placer que obtengo de tus palabras empapadas, pero quizás sea el modo de cubrirlas de caricias limpias.
ResponderEliminarSomos seres cambiantes que recorren caminos cicatrizando nuestros propios pasos… Y la mente, nuestra mente…es a veces nuestra más dañina enemiga… Y es en esa locura de incesante batalla de mente y corazón, donde nos purificamos, para seguir adelante…
ResponderEliminarUn post verdaderamente profundo e intenso, mi querida María…
Un placer sentir(te)…
Bsoss y cariños gigantes ♥
Tremenda tu entrada María.. de verdad estremecedora...
ResponderEliminarMe ha impactado mucho, revela, emociona, deja ese sabor frío..
Imágenes y texto muy impactantes.....
ResponderEliminarUn abrazo fuerte fuerte ♥
Besos muchos ♥ MaRía ♥
Las imágenes son escalofriantes... y vaya cambio más frío y triste, ¿no?
ResponderEliminarUn beso guapa,
Noa
Pasmado me dejaste, no se que decir no me salen las palabras. Mil besos de terciopelo.
ResponderEliminarMe desgarras, y te siento.
ResponderEliminarun beso.